La ministra de Defensa, Margarita Robles, se ha reunido este jueves con su homólogo de Arabia Saudí, el príncipe Khalid Bin Salman. Un encuentro que se produjo para tratar diversas temas relacionados con sus carteras, pero que desbloquea la autorización para que Saudi Telecom (STC) pueda subir su participación accionarial en Telefónica hasta el 9,9% del capital, un plácet que en estos momentos depende precisamente de Defensa, tras recibir el visto bueno del Ministerio de Economía hace casi un mes.
El encuentro que se produjo en la sede del ministerio en Madrid responde a la normalidad institucional, aunque fuentes cercanas al Gobierno también confirman a THE OBJECTIVE que la autorización a la empresa saudí es solo cuestión de días. Desde el Ministerio de Economía indican a este diario que el proceso ahora está en manos de la cartera de Margarita Robles, mientras que al mismo tiempo otras voces dentro del Ejecutivo señalan que se están cerrando los últimos flecos administrativos.
Por otro lado, en el mercado se trabaja con la hipótesis de que la autorización ya está concedida. Este mismo jueves se produjo un inusual movimiento de compra de acciones de Telefónica con una contratación que se disparó durante toda la jornada. Fuentes bursátiles han indicado a este diario que esta anomalía puede haberse producido porque STC ya esté canjeando los derivados que tiene en la operadora española, algo que solo podría hacer con el plácet del Ejecutivo.
Derivados de Telefónica
STC compró hace más de un año un 4,9% en acciones y otro 5% en derivados, hasta invertir 2.000 millones de euros. No obstante, la ley de inversiones indica que cualquier empresa que quiera comprar más de un 5% en una compañía vinculada a la Defensa (como el caso de Telefónica) tiene que pasar por la autorización del Consejo de Ministros y recibir además un informe favorable de la Secretaría de Estado de Comercio y otro del Ministerio de Defensa.
Este diario ya explicó hace tres semanas que esta autorización era inminente -la solicitud se presentó a finales de junio-, pero tras el visto bueno de Economía se está a la espera del pronunciamiento de Defensa. Un movimiento que se ha retrasado más de lo esperado, pero que no tardaría en llegar. Incluso hay quien se aventura a señalar que se podría producir antes de que finalice este mes de octubre.
Por otro lado, la visita del Ministro de Defensa, Khalid Bin Salman, es una más dentro del importante desembarco de autoridades del país árabe en España. A comienzos de semana la visita fue del ministro de Industria, Bandar Alkhorayef, quien vino para atraer inversiones e incluso concedió una entrevista a El Economista refiriéndose a la entrada de STC en Telefónica, aunque no aportó demasiados detalles.
STC se reúne con Cuerpo
Y exactamente hace un mes, también visitaron España representantes de la operadora de telecomunicaciones saudí. El ministro de Economía, Carlos Cuerpo, mantuvo un encuentro en Madrid con el consejero delegado de STC, Olayan Alwetaid, y su equipo directivo. Del mismo modo, el ministro de Transformación Digital, Óscar López, mantuvo un encuentro similar, pero en las dependencias de esta cartera.
Cuando se confirme oficialmente la autorización del Gobierno -que podría conocerse en el Consejo de Ministros de la próxima semana- tocará el turno para que STC culmine el canje de derivados, aproximadamente unos 1.000 millones de euros, y llegue al 9,9%. Posteriormente, deberá presentar sus credenciales en Telefónica y ejercer sus derechos políticos, solicitando un sillón en el consejo de la operadora.
La SEPI y Criteria
Esto supondría hacer al menos un par de movimientos en el consejo de administración de Telefónica. La idea de la compañía es hacer una última gran modificación con la que se puedan cumplir los criterios de gobernanza respecto de vocales independientes y mujeres. En el caso de que la operadora saudí proponga un consejero hombre, se deberá buscar encaje para otra presencia femenina, lo que a su vez deberá significar otra salida. Del mismo modo, como el nuevo representante será dominical se podría forzar la salida de algún consejero que tenga esta misma condición.
La entrada de la empresa saudí en septiembre del año pasado generó un terremoto accionarial, tras el cual el Estado adquirió el 10% de la compañía a través de la SEPI y Criteria subió de un 5% (compartido con Caixa) a un 10% en solitario. Esto generará que Telefónica pasa de tener un capital atomizado a estar en poder de tres grandes accionistas reconocibles que en conjunto aglutinarán el 30% del capital.